Crítica: J Edgar de Clint Easwood

J. Edgar – Estreno 27 de Enero de 2012

Clint Eastwood sigue escarbando en la historia americana y se aparta un poco de lo bueno a lo que nos tiene acostumbrados (Gran Torino, Mystic River) para traernos J. Edgar, el biopic de J. Edgar Hoover, enigmático creador del FBI y jefe de este durante 50 años. Leonardo Di Caprio es quien se encarga de resucitarle.

El film, con un cierto regusto a película antigua, recrea fielmente los estados unidos de 1919 a 1972, cuando en plena administración Nixon muere Hoover. Para ello la narración se sirve del mismo Hoover dictando a su fiel secretaria Gandi (Naomi Watts) el relato de su vida y evolución al frente del FBI.

A partir de ahi, se irán dando saltos en el tiempo a distintas épocas para ir reconstruyendo la personalidad de un atormentado Hoover por su sexualidad y por los problemas, vicios y obsesiones que fue recopilando a lo largo de sus años en el FBI. Su filosofía para arreglar el país era «doblar las leyes», como el mismo Hoover afirma. Podríamos decir que Hoover era un antihéroe disfrazado de héroe para la opinión publica y con un ansia desmesurada de poder, aunque la película se centra más en su drama personal que en sus ansias de poder y sus corruptelas, aunque las muestra sin escarbar demasiado en ellas.

Un Di Caprio que no hace su mejor papel y una película bastante aburrida es en lo que podemos resumir J. Edgar, pero lo cortés no quita lo valiente, también es cierto que la película está bien dirigida y el guión no es del todo malo. Una delicia para los estadounidenses que tanto ansiaban saber más sobre uno de sus héroes nacionales sobre el que quedaba (y queda) mucho por decir, pero mucho me temo que aquí Hoover es un personaje bastante anónimo y se necesitaba una película con muchos ingredientes más para hacerla interesante al publico en este caso, español.  Daremos una oportunidad a Eastwood para resarcirse esta vez como actor en Trouble with the Curve, pero eso ya es otra historia…

Frase memorable: La sociedad que no está interesada ni dispuesta a conocer su pasado, está condenada al fracaso.

LO MEJOR: El tratamiento humano que el guión hace del personaje.

LO PEOR: Terriblemente aburrida.

NOTA: (6/10)